I was thinking about... Christmas
Dicen que estas fechas son demasiado dulces, empalagosas, y que están llenas de hipocresía y falsedad. Que deseamos felices fiestas al vecino del segundo al que no soportamos, que nos emborrachamos con los compañeros del trabajo a los que día a día ponemos verdes, que hacemos regalos sin sentimiento, que a todo el mundo le importa un pito el verdadero sentido de esta época.
Pero digo yo que más vale una vez al año de buenas intenciones, buenas palabras y sonrisas, que ninguna. Más vale ir a una cena que no te apetece un carajo y descubrir que esa compañera que tiene cara de boba es un encanto que quedarse en casa haciendo lo mismo de siempre. Vale más ilusionarse juntos por un día soñando con que quizás mañana seamos ricos que pasar de largo y no saber en qué está pensando el otro. Porque digo yo que a nadie le amarga un dulce y, aunque ese dulce venga como regalo obligado por las circunstancias, sabe igual de bien.
Así que, por todo eso, me declaro partidaria de la Navidad (entiéndase como concepto que abarca hasta el día de Reyes) y de todas las convenciones que trae consigo. Digamos que es lo mismo que el carnet por puntos: si no nos obligan a ir más despacio, aunque sepamos que es lo correcto, seguiremos corriendo.
Paremos, pues, y miremos a nuestro alrededor. Sonriamos aunque estemos muertos de frío y sueño y lo mismo ese gesto nos transpasa la cara y nos calienta un poco el alma.
Así que, Feliz Navidad. Y creas o no creas en Dios, nunca dejes de creer en los demás y en tí mismo que, al fin y al cabo, viene a ser lo mismo.
miércoles, 22 de diciembre de 2010
jueves, 16 de diciembre de 2010
Talento
Gardner desarrolló la teoría de la inteligencia múltiple, según la cual todos poseemos una serie de inteligencias más o menos desarrolladas que condicionan aquello para lo que tenemos facilidad y aquello que nos cuesta más esfuerzo.
En mi caso, creo que la inteligencia predominante es la lingüística, si bien es cierto que hay otras dos o tres que tengo también más desarrolladas que la naturalista, por ejemplo. Y desde luego, hay una que no está apenas desarrollada en mí que es la kinestética, o la inteligencia asociada al movimiento.
Quienes me conocen desde hace tiempo saben que nunca he sido buena en deporte, si bien soy bastante constante y gracias a eso logro suplir las muchas carencias que tengo en ese área. Pero últimamente estoy cambiando y desarrollando esa parte de mí que tenía adormecida gracias al baile.
Y creo que es algo que deberíamos intentar todos. Porque es comodísimo profundizar en lo que nos gusta y nos resulta sencillo, pero lo que de verdad le llena a uno es ver cuánto puede avanzar todavía en campos en los que creía que la batalla estaba perdida.
Me cuesta mucho esfuerzo bailar, memorizar los pasos, no confundir unas coreografías con otras, pero salgo de mi única clase semanal de funky con una energía que no tengo, por ejemplo, cuando aprendo Inglés, si bien esto último es algo que disfruto enormemente. Pero creo que en la vida hay que afrontar los retos, ser valiente y atreverse a mejorar eso que nos da vergüenza, y lo mismo nos llevamos una sorpresa.
Bueno, y de paso os dejo por aquí un video de Fama que me encanta por el sentimiento que transmiten todos los bailarines y por lo positiva que es la letra de la canción. ¡Espero que os guste!
En mi caso, creo que la inteligencia predominante es la lingüística, si bien es cierto que hay otras dos o tres que tengo también más desarrolladas que la naturalista, por ejemplo. Y desde luego, hay una que no está apenas desarrollada en mí que es la kinestética, o la inteligencia asociada al movimiento.
Quienes me conocen desde hace tiempo saben que nunca he sido buena en deporte, si bien soy bastante constante y gracias a eso logro suplir las muchas carencias que tengo en ese área. Pero últimamente estoy cambiando y desarrollando esa parte de mí que tenía adormecida gracias al baile.
Y creo que es algo que deberíamos intentar todos. Porque es comodísimo profundizar en lo que nos gusta y nos resulta sencillo, pero lo que de verdad le llena a uno es ver cuánto puede avanzar todavía en campos en los que creía que la batalla estaba perdida.
Me cuesta mucho esfuerzo bailar, memorizar los pasos, no confundir unas coreografías con otras, pero salgo de mi única clase semanal de funky con una energía que no tengo, por ejemplo, cuando aprendo Inglés, si bien esto último es algo que disfruto enormemente. Pero creo que en la vida hay que afrontar los retos, ser valiente y atreverse a mejorar eso que nos da vergüenza, y lo mismo nos llevamos una sorpresa.
Bueno, y de paso os dejo por aquí un video de Fama que me encanta por el sentimiento que transmiten todos los bailarines y por lo positiva que es la letra de la canción. ¡Espero que os guste!
viernes, 10 de diciembre de 2010
Sueño
Este mundo, este país, se construye gracias al sueño de todos los que lo habitamos. Y no hablo del sueño que se tiene con los ojos cerrados, sino del que se arrastra con los ojos abiertos. De ese sueño provocado por enlazar dos trabajos y hacer encaje de bolillos para ver también a los niños, aunque sea un rato; el sueño que se arrastra de una semana a otra y a otra, porque uno no da abasto con el marido enfermo y la nieta que aún no supera el año a la que los padres no pueden cuidar porque trabajan de ocho a ocho. El sueño de las madres trabajadoras que se quedan despiertas hasta la una de la mañana cocinando para que los suyos coman caliente al día siguiente, a pesar de que ellas se tienen que resignar al dichoso sandwich de jamón de todos los días.
Y arrastrando ese sueño vivimos, trabajamos... y soñamos despiertos con el día en que el sueño se quede en la cama.
Y arrastrando ese sueño vivimos, trabajamos... y soñamos despiertos con el día en que el sueño se quede en la cama.
jueves, 21 de octubre de 2010
Ficción
Creo que es eso lo que necesito: ficción.
Historias de pasiones, crímenes, dolor, fuego, heroismo... que se acaban cuando cierras el libro (o sales del cine).
Estoy hasta arriba de teorías, de realidades, de cotidianidad, de todos somos iguales.
Y sí, es cierto, todos somos iguales. Al fin y al cabo nuestras necesidades fisiológicas y emocionales varían lo justo de una persona a otra, y lo mismo pasa con nuestras historias personales...
En cambio en las pelis, en los libros, la gente sale a la calle como si fueran los primeros del mundo en hacerlo, tan ideales ellos, y con esa música de fondo tan estupenda. Sufren, como si fueran las únicas personas en el mundo que sienten dolor y lloran como si con cada lágrima se vaciara un poco su alma.
Es más o menos lo mismo que sentimos cuando somos adolescentes, momento en el que nos sentimos observados por la dichosa "audiencia imaginaria", antes de darnos cuenta de que cada uno no se preocupa más que de su propio ombligo.
Pero yo, hoy en día, estoy en una época tan racional de mi vida que cuando veo una peli la contrasto mentalmente con las posibilidades que existen de que eso pasara en la realidad. Como si fuera de eso la cosa. Como si no necesitáramos creernos especiales, como si no fuéramos seres sociales, ávidos de historias de tiempos y de personas mejores...
Así que entre mis próximos planes está retrotraerme, aunque sea sólo durante un día, a esa época de cambios hormonales y consecuentes granos en la que nos creíamos los reyes del universo (o por lo menos sus príncipes) y todos los poemas hablaban de nosotros. Se aceptan compañeros de viaje.
Historias de pasiones, crímenes, dolor, fuego, heroismo... que se acaban cuando cierras el libro (o sales del cine).
Estoy hasta arriba de teorías, de realidades, de cotidianidad, de todos somos iguales.
Y sí, es cierto, todos somos iguales. Al fin y al cabo nuestras necesidades fisiológicas y emocionales varían lo justo de una persona a otra, y lo mismo pasa con nuestras historias personales...
En cambio en las pelis, en los libros, la gente sale a la calle como si fueran los primeros del mundo en hacerlo, tan ideales ellos, y con esa música de fondo tan estupenda. Sufren, como si fueran las únicas personas en el mundo que sienten dolor y lloran como si con cada lágrima se vaciara un poco su alma.
Es más o menos lo mismo que sentimos cuando somos adolescentes, momento en el que nos sentimos observados por la dichosa "audiencia imaginaria", antes de darnos cuenta de que cada uno no se preocupa más que de su propio ombligo.
Pero yo, hoy en día, estoy en una época tan racional de mi vida que cuando veo una peli la contrasto mentalmente con las posibilidades que existen de que eso pasara en la realidad. Como si fuera de eso la cosa. Como si no necesitáramos creernos especiales, como si no fuéramos seres sociales, ávidos de historias de tiempos y de personas mejores...
Así que entre mis próximos planes está retrotraerme, aunque sea sólo durante un día, a esa época de cambios hormonales y consecuentes granos en la que nos creíamos los reyes del universo (o por lo menos sus príncipes) y todos los poemas hablaban de nosotros. Se aceptan compañeros de viaje.
domingo, 26 de septiembre de 2010
Música ligera
I was thinking about... songs I love to sing while I drive
Últimamente la vida me tiene hartita de cosas serias e importantes, así que, para compensar, estoy en modo música intrascendente. Y es que es muchísimo más fácil empezar con una sonrisa el día si piensas que "tonight's gonna be a good night" y cantas a todo trapo "if you fall for me, I'm not easy to please" mientras el DJ prepara a Lady Gaga para que te deleite con su "Alehandro, Alehandro, Ale, Alehandro" y a "El Pescao" (juro que hay un cantante que ha elegido voluntariamente eso como nombre artístico) para que te cante con buen rollito que sólo tiene que hacer "un castillo de arena bajo tus pies" (¿?¿?¿?).
Sí, definitivamente, me encantan los 40.
Y no es irónico, de verdad que me encanta la música ligera y fácil de cantar y bailar. Lo que me preocupa es que ése sea el único tipo de música que nos llega a través de la radio... Porque estar en modo intrascendente es maravilloso, pero vivir de ese modo 24/7 tiende a preocupante.
Últimamente la vida me tiene hartita de cosas serias e importantes, así que, para compensar, estoy en modo música intrascendente. Y es que es muchísimo más fácil empezar con una sonrisa el día si piensas que "tonight's gonna be a good night" y cantas a todo trapo "if you fall for me, I'm not easy to please" mientras el DJ prepara a Lady Gaga para que te deleite con su "Alehandro, Alehandro, Ale, Alehandro" y a "El Pescao" (juro que hay un cantante que ha elegido voluntariamente eso como nombre artístico) para que te cante con buen rollito que sólo tiene que hacer "un castillo de arena bajo tus pies" (¿?¿?¿?).
Sí, definitivamente, me encantan los 40.
Y no es irónico, de verdad que me encanta la música ligera y fácil de cantar y bailar. Lo que me preocupa es que ése sea el único tipo de música que nos llega a través de la radio... Porque estar en modo intrascendente es maravilloso, pero vivir de ese modo 24/7 tiende a preocupante.
miércoles, 22 de septiembre de 2010
Belleza
I was thinking about... the nicest things
Puede que no te guste el baile. Aunque el baile es un concepto tan amplio que es casi imposible no sentirse atraído o no admirar alguno de los muchos estilos que existen.
Pero lo que es seguro es que el ojo humano es sensible a lo bello, a lo perfecto. Y el vídeo que os he puesto arriba es la perfección llevada a cabo por niñas de no más de trece años que realizan una coreografía que, por primera vez en mi vida, me ha puesto los pelos de punta. Ya sólo por eso merece la pena poner este vídeo por aquí para compartirlo con vosotros.
Aunque no os guste el baile, probad a darle al play y disfrutad de su belleza durante unos segundos... no creo que luego queráis dejar de verlo.
PD: Gracias a Araceli, que compartió esta maravilla a través de Facebook
martes, 14 de septiembre de 2010
Lo necesito
I was thinking about... what we really need
¿Qué necesitamos?
Sin llegar al extremo de tenernos que ir a vivir en pelotas a una cueva... ¿qué es lo realmente imprescindible?
Haremos un tic en comida, medicinas y ropa. ¿Pero cuánta? Llega un momento en que no hay armario que soporte tanto estar a la moda... ¿Importa? Y yo soy la primera que se pirra por un jersey original, un abrigo bonito, unos vaqueros que me favorezcan... Pero me agobio a mí misma. Vayas cuando vayas a cualquier centro comercial, siempre hay gente. Y me pregunto si habrá un límite.
Hay quien opina que esta crisis puede enfocarse desde una perspectiva positiva: como cuando en nuestras vidas personales nos encontramos inmersos en una y conseguimos (generalmente) hacer de ella un punto de inflexión positivo, una oportunidad para replantearse los valores que nos han llevado a esa situación no deseada. Dicen estos optimistas que quizás salgamos de ésta siendo un poco más conscientes de lo que hacemos con nuestro dinero, un poco menos ambiciosos, algo más razonables.
Pero me da en la nariz que seguimos teniendo cierta pulsión a tropezar una y otra vez con la misma piedra.
Todas estas reflexiones vienen de lejos, pero mi breve paso por la feria del regalo en Madrid ha sido la gota que ha colmado el vaso. Pondré unos ejemplos ilustrativos de lo que se vende en algunos de los stands y, por lo tanto, de lo que la gente en la calle demanda y compra:
¿Qué necesitamos?
Sin llegar al extremo de tenernos que ir a vivir en pelotas a una cueva... ¿qué es lo realmente imprescindible?
Haremos un tic en comida, medicinas y ropa. ¿Pero cuánta? Llega un momento en que no hay armario que soporte tanto estar a la moda... ¿Importa? Y yo soy la primera que se pirra por un jersey original, un abrigo bonito, unos vaqueros que me favorezcan... Pero me agobio a mí misma. Vayas cuando vayas a cualquier centro comercial, siempre hay gente. Y me pregunto si habrá un límite.
Hay quien opina que esta crisis puede enfocarse desde una perspectiva positiva: como cuando en nuestras vidas personales nos encontramos inmersos en una y conseguimos (generalmente) hacer de ella un punto de inflexión positivo, una oportunidad para replantearse los valores que nos han llevado a esa situación no deseada. Dicen estos optimistas que quizás salgamos de ésta siendo un poco más conscientes de lo que hacemos con nuestro dinero, un poco menos ambiciosos, algo más razonables.
Pero me da en la nariz que seguimos teniendo cierta pulsión a tropezar una y otra vez con la misma piedra.
Todas estas reflexiones vienen de lejos, pero mi breve paso por la feria del regalo en Madrid ha sido la gota que ha colmado el vaso. Pondré unos ejemplos ilustrativos de lo que se vende en algunos de los stands y, por lo tanto, de lo que la gente en la calle demanda y compra:
- cerditas sonrientes con tutú para colgar del árbol de Navidad
- un Papá Noel con los brazos en jarras que es, precisamente, una jarra para el té/café
- paraguas ribeteados con piel artificial (en marrón o negro, your choice)
- cojines con forma de capullos de rosa
- bomboneras de cristal
- un reno de 1,20m de alto por 1,50 de largo
- etc
martes, 7 de septiembre de 2010
"Liberados"
I was thinking about... s e x
Una entrevista digital con Valérie Tasso que he encontrado por casualidad en El País me ha dejado pensando. En ella, la escritora responde de la siguiente manera la pregunta de uno de los lectores:
"...al sexo lo que hay que desligarlo no es de los susurros de la intimidad sino del parloteo de la colectividad. Me explico: hablar y practicar sexo de manera permanente es, paradójicamente, un proceso de ocultación. Pensamos que, haciendo eso, ya estamos más "liberados" cuando, en el fondo lo único que estamos haciendo es reforzar una concepción alineada y estandarizada del deseo."
¿Opiniones al respecto?
PD: Sí, ya estoy de vuelta.
PD2: He aparcado temporalmente el proyecto del libro. Cuando retome su lectura, iré poniendo comentarios por aquí.
Una entrevista digital con Valérie Tasso que he encontrado por casualidad en El País me ha dejado pensando. En ella, la escritora responde de la siguiente manera la pregunta de uno de los lectores:
"...al sexo lo que hay que desligarlo no es de los susurros de la intimidad sino del parloteo de la colectividad. Me explico: hablar y practicar sexo de manera permanente es, paradójicamente, un proceso de ocultación. Pensamos que, haciendo eso, ya estamos más "liberados" cuando, en el fondo lo único que estamos haciendo es reforzar una concepción alineada y estandarizada del deseo."
¿Opiniones al respecto?
PD: Sí, ya estoy de vuelta.
PD2: He aparcado temporalmente el proyecto del libro. Cuando retome su lectura, iré poniendo comentarios por aquí.
viernes, 11 de junio de 2010
Moscas
I was thinking about... thought-provoking books
Cuando en la introducción de un libro recién regalado uno se encuentra con una idea tan contundente como "Aprender y disfrutar es el secreto de una vida plena. Aprender sin disfrutar nos reseca por dentro, disfrutar sin aprender nos vuelve estúpidos.", no queda más remedio que seguir leyendo.
El libro en cuestión se titula "¿Quién soy y... cuántos?", un título poco afortunado que quizás mejora un poco en su versión original (Wer bin ich - und wenn ja, wie viele?) escrito por Richard David Precht.
En definitiva, el libro es una reflexión sobre las cuestiones más importantes en la vida del hombre: ¿Qué puedo saber? ¿Qué debo hacer? ¿Qué me cabe esperar? y, aunque sólo he leído un capítulo, he pensado que estaría interesante ir poniendo por aquí las reflexiones que me provoque y que me contéis qué opináis al respecto (si tenéis tiempo y/o ganas).
El primer capítulo trata de la percepción del mundo por parte de los humanos. ¿Qué es la verdad?, se titula.
Me parecen curiosas muchas de las ideas que expone, pero quizás una que ya se me había pasado por la cabeza, aunque no con esas palabras es el hecho de que nuestro intelecto es puramente humano y no tiene "ninguna misión ulterior más allá de la vida humana". Es más, es ridículo y pretencioso asumir que todo lo que percibimos y pensamos es la verdad absoluta. Seguro que la mosca también "navega por el aire poseída de ese mismo pathos y se siente el centro volante de este mundo".
En definitiva, somos demasiado arrogantes considerando nuestra percepción como la única válida. Tengo la sensación de que hay estímulos a nuestro alrededor que ni siquiera percibimos y que influyen en la Naturaleza tanto o más que los que sí sentimos. Porque el hecho de que una persona nazca sorda no implica que en el mundo no existan los sonidos.
Cuando en la introducción de un libro recién regalado uno se encuentra con una idea tan contundente como "Aprender y disfrutar es el secreto de una vida plena. Aprender sin disfrutar nos reseca por dentro, disfrutar sin aprender nos vuelve estúpidos.", no queda más remedio que seguir leyendo.
El libro en cuestión se titula "¿Quién soy y... cuántos?", un título poco afortunado que quizás mejora un poco en su versión original (Wer bin ich - und wenn ja, wie viele?) escrito por Richard David Precht.
En definitiva, el libro es una reflexión sobre las cuestiones más importantes en la vida del hombre: ¿Qué puedo saber? ¿Qué debo hacer? ¿Qué me cabe esperar? y, aunque sólo he leído un capítulo, he pensado que estaría interesante ir poniendo por aquí las reflexiones que me provoque y que me contéis qué opináis al respecto (si tenéis tiempo y/o ganas).
El primer capítulo trata de la percepción del mundo por parte de los humanos. ¿Qué es la verdad?, se titula.
Me parecen curiosas muchas de las ideas que expone, pero quizás una que ya se me había pasado por la cabeza, aunque no con esas palabras es el hecho de que nuestro intelecto es puramente humano y no tiene "ninguna misión ulterior más allá de la vida humana". Es más, es ridículo y pretencioso asumir que todo lo que percibimos y pensamos es la verdad absoluta. Seguro que la mosca también "navega por el aire poseída de ese mismo pathos y se siente el centro volante de este mundo".
En definitiva, somos demasiado arrogantes considerando nuestra percepción como la única válida. Tengo la sensación de que hay estímulos a nuestro alrededor que ni siquiera percibimos y que influyen en la Naturaleza tanto o más que los que sí sentimos. Porque el hecho de que una persona nazca sorda no implica que en el mundo no existan los sonidos.
sábado, 5 de junio de 2010
Los otros
I was thinking about... beautiful people
Somos seres sociales lo queramos o no y, por lo tanto, lo que podemos lograr con el apoyo de los otros es mucho más de lo que podemos lograr por nuestra cuenta.
Me viene este pensamiento a la cabeza tras ver en play Cuatro un reportaje sobre Rafael, un hombre que se ha sometido recientemente a un transplante de cara. Pese a tener la cara deformada durante la mayor parte del tiempo que dura el reportaje, su fuerza interior, su simpatía y su optimismo se te contagian y te hacen ver más allá de la deformidad de su rostro. Tanto él como todas las personas que le rodean (madre y hermana, amigos y, en especial, ese amigo de la infancia que lleva a su lado toda la vida...) muestran una actitud envidiable y digna de la más pura y absoluta admiración.
No dudo que Rafael tenga de manera innata un carácter divertido y afable, capaz de sobrellevar las dificultades con buen ánimo, pero estoy segura de que sin el cariño que le rodea, no rezumaría felicidad por cada poro de su piel.
Volvemos, pues, al viejo debate sobre la influencia de la Naturaleza y del ambiente en la forja de nuestro carácter: ¿qué pesa más? Es difícil saberlo. Como educadora, me inclino más por la importancia del entorno ( y, sobre todo, de las personas que lo conforman).
Rafael tiene ya un rostro relativamente normal. Pero eso no le hace más feliz. O puede que sí, pero desde luego no le hace más querido. Los que le conocen le quieren tal y como es, antes y después de la operación, la cual le servirá, más que nada, para no verse como un monstruo en los ojos de los que le miran sin hablarle. Porque en cuanto los monstruos abren la boca queda claro que son igual o más humanos que cualquiera de nosotros, y que tienen mucho que enseñarnos.
Somos seres sociales lo queramos o no y, por lo tanto, lo que podemos lograr con el apoyo de los otros es mucho más de lo que podemos lograr por nuestra cuenta.
Me viene este pensamiento a la cabeza tras ver en play Cuatro un reportaje sobre Rafael, un hombre que se ha sometido recientemente a un transplante de cara. Pese a tener la cara deformada durante la mayor parte del tiempo que dura el reportaje, su fuerza interior, su simpatía y su optimismo se te contagian y te hacen ver más allá de la deformidad de su rostro. Tanto él como todas las personas que le rodean (madre y hermana, amigos y, en especial, ese amigo de la infancia que lleva a su lado toda la vida...) muestran una actitud envidiable y digna de la más pura y absoluta admiración.
No dudo que Rafael tenga de manera innata un carácter divertido y afable, capaz de sobrellevar las dificultades con buen ánimo, pero estoy segura de que sin el cariño que le rodea, no rezumaría felicidad por cada poro de su piel.
Volvemos, pues, al viejo debate sobre la influencia de la Naturaleza y del ambiente en la forja de nuestro carácter: ¿qué pesa más? Es difícil saberlo. Como educadora, me inclino más por la importancia del entorno ( y, sobre todo, de las personas que lo conforman).
Rafael tiene ya un rostro relativamente normal. Pero eso no le hace más feliz. O puede que sí, pero desde luego no le hace más querido. Los que le conocen le quieren tal y como es, antes y después de la operación, la cual le servirá, más que nada, para no verse como un monstruo en los ojos de los que le miran sin hablarle. Porque en cuanto los monstruos abren la boca queda claro que son igual o más humanos que cualquiera de nosotros, y que tienen mucho que enseñarnos.
jueves, 3 de junio de 2010
Correr
Yo nunca he sido deportista: ni tengo una constitución que me permita obtener un alto rendimiento ni saco tiempo para el ejercicio. Pero desde hace casi tres semanas (¡!¡! se oyen aplausos a mí misma en mi cabeza) estoy saliendo a correr todas las mañanas 4.82 kilómetros según mi movil. Obviamente, no corro todo el tiempo, pero el simple hecho de conseguir madrugar todos los días y, tras un zumo y una manzana, salir a trotar un poco, me hace sentirme orgullosa de mi misma. Además, que ya empieza el veranito y hay que reducir las cartucheras provocadas por la Oposición (una compi de voluntariado diría: que yo sepa, no es estudiar lo que engorda :D ... tiene razón, es la nevera).
Total, que aunque mi velocidad media es bastante ridícula y soy adelantada con frecuencia por señoras cachas y viejetes musculosos, me siento bien. A ver cuánto consigo mantenerlo... y a ver si para cuando esté en la playa puedo echarme unas carreritas por la arena sin ahogarme, que es un rollo muy hollywoodiense y me apetece este año.
martes, 25 de mayo de 2010
Six impossible things
I was thinking about... Wonderland
"There is no use trying", said Alice; "One can't believe impossible things." "I dare say you haven't had much practice," said the Queen. "When I was your age, I always did it for half an hour a day. Why, sometimes, I've belived as many as six impossible things before breakfast."
Me parece un buen ejercicio de imaginación. No digo que haya que hacerlo todos los días, pero una vez a la semana nos puede servir para retomar el contacto con el niño soñador que llevamos dentro... Ahí van las mías:
- Si saltas fuerte sobre un charco te teletransportas al siguiente.
- En las pelusillas de polen se esconden pequeños seres extraterrestres que poco a poco están extendiéndose por el planeta.
- El aire de Madrid es tan denso en verano que, si saltara desde mi terraza, aterrizaría en el suelo suavemente.
- ...
¿Ideas?
Para eso están los comentarios. :)
martes, 20 de abril de 2010
Toi Derricotte
I was thinking about... beautiful poems
Lo bueno de estar haciendo la programación didáctica es que cada cierto tiempo me encuentro con joyas como ésta:
For black women who are afraid
A black woman comes up to me at break in the writing
workshop and reads me her poem, but she
says she can't read it out loud
because there's a woman in a car on her way
to work and her hair is blowing in the breeze
and, since her hair is blowing, the woman must be
white, and she shouldn't write about a white woman
whose hair is blowing, because
maybe the black poets will think she wants to be that woman and be
mad at her and say she hates herself,
and maybe they won't let her explain
that she grew up in a white neighborhood
and it's not her fault, it's just what she sees.
But she has to be so careful. I tell her to write
the poem about being afraid to write,
and we stand for a long time like that,
respecting each other's silence.
Toi Derricotte
Siento el retraso, pero me estoy ocupando últimamente más del otro blog:
http://profenovata.blogspot.com
Feel free to read me there!!
Lo bueno de estar haciendo la programación didáctica es que cada cierto tiempo me encuentro con joyas como ésta:
For black women who are afraid
A black woman comes up to me at break in the writing
workshop and reads me her poem, but she
says she can't read it out loud
because there's a woman in a car on her way
to work and her hair is blowing in the breeze
and, since her hair is blowing, the woman must be
white, and she shouldn't write about a white woman
whose hair is blowing, because
maybe the black poets will think she wants to be that woman and be
mad at her and say she hates herself,
and maybe they won't let her explain
that she grew up in a white neighborhood
and it's not her fault, it's just what she sees.
But she has to be so careful. I tell her to write
the poem about being afraid to write,
and we stand for a long time like that,
respecting each other's silence.
Toi Derricotte
Siento el retraso, pero me estoy ocupando últimamente más del otro blog:
http://profenovata.blogspot.com
Feel free to read me there!!
martes, 16 de marzo de 2010
China
I was thinking about... drunk nights
Tengo pensada una entrada desde hace tiempo, pero no es la que voy a publicar hoy. Porque hoy me he encontrado en el blog de Philip con una foto en la que salgo bailando sevillanas agarrada de una china. Y me preocupa.
Porque fue en Abril de 2006 y no tengo ni puñetera idea de quién era la china ni en qué idioma hablaba con ella. Sé que era amiga de Charlotte pero a partir de ahí es todo una gran zona borrosa de mi memoria.
Eso es todo.
Simplemente me parece gracioso recordar las cosas que hacemos cuando estamos borrachos con la mayor naturalidad del mundo y que luego en nuestra casa, cuatro años más tarde, nos parecen absolutamente improbables.
Ahí está la magia.
Tengo pensada una entrada desde hace tiempo, pero no es la que voy a publicar hoy. Porque hoy me he encontrado en el blog de Philip con una foto en la que salgo bailando sevillanas agarrada de una china. Y me preocupa.
Porque fue en Abril de 2006 y no tengo ni puñetera idea de quién era la china ni en qué idioma hablaba con ella. Sé que era amiga de Charlotte pero a partir de ahí es todo una gran zona borrosa de mi memoria.
Eso es todo.
Simplemente me parece gracioso recordar las cosas que hacemos cuando estamos borrachos con la mayor naturalidad del mundo y que luego en nuestra casa, cuatro años más tarde, nos parecen absolutamente improbables.
Ahí está la magia.
lunes, 1 de marzo de 2010
Amid the noise and haste...
I was thinking about... healing words...
No importa cuánto tiempo pase o en qué circunstancias me encuentre, siempre que me topo con estas palabras me siento reconfortada. Me parecen indiscutiblemente llenas de sabiduría y paz. Y me reconcilian con el mundo. Así que aquí os dejo el Desiderata, un texto encontrado en un monasterio inglés de autoría desconocida que reúne en unas pocas líneas decenas de lecciones vitales. Espero que os sirva tanto como a mí.
...
Go placidly amid the noise and haste, and remember what peace there may be in silence. As far as possible without surrender be on good terms with all persons. Speak your truth quietly and clearly; and listen to others, even the dull and ignorant; they too have their story. Avoid loud and aggressive persons, they are vexatious to the spirit. If you compare yourself with other, you may become vain and bitter; for always there will be greater and lesser persons than yourself. Enjoy your achievements as well as your plans. Keep interested in your own career, however humble; it is a real possession in the changing fortunes of time. Exercise caution in your business affairs; for the world is full of trickery. But let this not blind you to what virtue there is; many persons strive for high ideals; and everywhere life is full of heroism. Be yourself. Especially, do not feign affection. Neither be cynical about love; for in the face of all aridity and disenchantment it is perennial as the grass. Take kindly the counsel of the years, gracefully surrendering the things of youth. Nurture strength of spirit to shield you in sudden misfortune. But do not distress yourself with imaginings. Many fears are born of fatigue and loneliness. Beyond a wholesome discipline, be gentle with yourself. You are a child of the universe, no less than the trees and the stars; you have a right to be here. And whether or not it is clear to you, no doubt the universe is unfolding as it should. Therefore be at peace with God, whatever you conceive Him to be, and whatever your labors and aspirations, in the noisy confusion of life keep peace with your soul. With all its sham, drudgery and broken dreams, it is still a beautiful world. Be careful. Strive to be happy.
No importa cuánto tiempo pase o en qué circunstancias me encuentre, siempre que me topo con estas palabras me siento reconfortada. Me parecen indiscutiblemente llenas de sabiduría y paz. Y me reconcilian con el mundo. Así que aquí os dejo el Desiderata, un texto encontrado en un monasterio inglés de autoría desconocida que reúne en unas pocas líneas decenas de lecciones vitales. Espero que os sirva tanto como a mí.
...
Go placidly amid the noise and haste, and remember what peace there may be in silence. As far as possible without surrender be on good terms with all persons. Speak your truth quietly and clearly; and listen to others, even the dull and ignorant; they too have their story. Avoid loud and aggressive persons, they are vexatious to the spirit. If you compare yourself with other, you may become vain and bitter; for always there will be greater and lesser persons than yourself. Enjoy your achievements as well as your plans. Keep interested in your own career, however humble; it is a real possession in the changing fortunes of time. Exercise caution in your business affairs; for the world is full of trickery. But let this not blind you to what virtue there is; many persons strive for high ideals; and everywhere life is full of heroism. Be yourself. Especially, do not feign affection. Neither be cynical about love; for in the face of all aridity and disenchantment it is perennial as the grass. Take kindly the counsel of the years, gracefully surrendering the things of youth. Nurture strength of spirit to shield you in sudden misfortune. But do not distress yourself with imaginings. Many fears are born of fatigue and loneliness. Beyond a wholesome discipline, be gentle with yourself. You are a child of the universe, no less than the trees and the stars; you have a right to be here. And whether or not it is clear to you, no doubt the universe is unfolding as it should. Therefore be at peace with God, whatever you conceive Him to be, and whatever your labors and aspirations, in the noisy confusion of life keep peace with your soul. With all its sham, drudgery and broken dreams, it is still a beautiful world. Be careful. Strive to be happy.
martes, 9 de febrero de 2010
Maestra
I was thinking about... teaching
Ahora que ya he empezado a dar clases y que tres veces por semana estoy a cargo de unos niños a ratos adorables y a ratos asesinables, no puedo más que reafirmarme en la decisión que tomé al cambiar de carrera. No hay nada más satisfactorio que trabajar en lo que a uno verdaderamente le gusta.
Lo recomiendo.
sábado, 30 de enero de 2010
Six Feet Under
I was thinking about... perfection
Empecé a ver Six Feet Under por casualidad. En Navidad, buscando regalos me topé con el pack de las cinco temporadas de esta serie. Con unas palabras que se quedaron dando vueltas en mi cabeza:
Everything.
Everyone.
Everywhere.
Ends.
y la imagen de un coche funerario verde circulando por una carretera infinita y solitaria.
Recordé entonces que mi tía me había hablado muy bien de esa serie. Y recordé que empezamos a ver un capítulo cuando todavía la echaban por la tele y que me impactó la primera escena en la que alguien moría de manera brusca. Y que mi tía me dijo: "Siempre matan a alguien al principio".
Recordé todo eso y entonces empecé a verla.
Descubrí en cada capítulo sesenta minutos de lección vital y de buen cine. De personajes inolvidables y dolorosamente reales. De amor en todas sus versiones. De vida y muerte.
El final de esta serie es calificado por muchos como el mejor final en la historia de las series de televisión. No puedo estar más de acuerdo.
Os he puesto arriba el trailer promocional de la quinta y última temporada. Me ha costado decidirme porque todos los trailers de todas las temporadas son impresionantes. Me he quedado finalmente con este porque cuando uno termina de ver la serie, la canción que suena (Breathe Me de Sia) se le queda anclada en lo más profundo del cerebro y nunca más puede olvidarla.
Echadle un vistazo y contádmelo luego. Os prometo que no os arrepentiréis.
lunes, 18 de enero de 2010
Bebiendo la espuma de los días...
I was thinking about... pure talent
Estos chicos no son más grandes porque se saldrían del escenario... El concierto de ayer fue inolvidable, pocas veces habrá visto Clamores unos artistas y un público tan entregados.
Durante el tiempo que duró nada más importaba... sólo su música, nuestras palmas, sus letras...
El próximo es el 27 de Febrero en Zanzíbar. Yo, desde luego, estaré ahí.
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